11 de junio de 2012

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 I'm gonna say the one thing you aren't supposed to say. I love you... but I love me more


Creo que vi la película de Sex and the City aproximadamente cinco veces y ésta frase de Samantha, en particular, siempre me queda retumbando en la cabeza, si bien, no coincido en muchas de las cosas que se plantean en la serie, o la forma en que encaran la solución de sus problemas, de este personaje puedo decir que de alguna forma siempre envidie su fortaleza, la confianza en sí misma. Hace unos días refugiadas del frió entre mates y lemon pie en la casa de mi amiga E me puse a hablar con su hermana.El tema de la charla fue que NN me volvió a escribir, volvió con sus te extraño, te quiero ver, venite a casa, no seas mala yo siempre estuve ahí para vos. Entonces, le conté mas o menos lo que fue la relación, las idas y vueltas, los malos entendidos, sus contradicciones, la agresión verbal a la que llegamos, el sentirme tan poca cosa cerca de él. No me puedo olvidar la ultima vez que nos juntamos y el mirándome como si nada me dijo, la verdad, últimamente, ni siquiera me gusta coger con vos, no se para que viniste. Realmente la pase mal, muy mal. Hasta que retome la terapia. En algún punto la cosa se había vuelto tóxica y sentía que sola era imposible seguir adelante. Algunos días podía verme cavando mi propia fosa, otros, ya estaba a punto de asfixiarme y a pesar de todos mis esfuerzos no podía ver de ninguna forma el escape.Después de escucharme hablar sin pausa por diez minutos en dos palabras la hermana de E me dijo, no flaca, se nota lo poco que te queres, no sé como aguantaste que te basurearan tanto.Basto sólo eso para darme cuenta del pequeño gran avance que tuve con la psicóloga, del pequeño gran "click" que hice durante estos meses, Tal vez en otro momento le hubiera dicho a N, esta bien, ya voy o te llamo mas tarde. Pero ahora solo puedo sentir dolor por no haberme valorado antes, por no haberle puesto los puntos.A veces, me hace falta abrazarme a mi misma, hacerme entender, aunque sea a la fuerza, que primero me tengo que aceptar yo, así, tan linda y loca como soy.Ahora siento que voy por la vida dando pasos tan chiquitos como los de un bebé y tan firmes como los de un gigante. La confianza en mi misma es algo que no lo tengo del todo dominado, pero creo que voy por buen camino. Esta vez por lo menos, me quise más yo, me elegí a mi.

1 comentario:

Café (con tostadas) dijo...

ja!

te lo voy a decir tan fácil como se dice tooodo desde afuera ;)

La única persona en el mundo que no puede no elegirte a vos sin que te pierdas en el camino, sos vos.

Bien ahí por esos avances!